Oh Santo Niño de Atocha, protector de los viajeros y refugio de los necesitados, escucha nuestras plegarias en este día. Con tu mirada tierna y tu corazón bondadoso, guíanos por el camino de la fe y la esperanza. Que tu luz ilumine nuestro camino en los momentos de oscuridad y que tu amor nos reconforte en las horas de aflicción. Santo Niño de Atocha, intercede por nosotros ante el Señor para que podamos encontrar consuelo en ti y fortaleza en nuestra fe. Amén.
Bondadoso y sabio, mi amado divino niño de atocha, tú que en tu seno has acogido a aquellos que en prisión cumplen condena injustamente.
Recibe mis alabanzas y mi devoción las cuales te ofrezco desde lo más profundo de mi corazón, suplico tu ayuda con la ayuda de tres padrenuestros, un avemaría y un gloria.
Honrando tu memoria y la de tus fieles labores llevando consuelo a los afligidos, tu que eres el fruto del inmaculado vientre de tu amada madre, que por ti recorrió el escabroso camino desde Jerusalén hasta Belén.
Pido en nombre de tu padre en el cielo tu misericordia y piedad, concédeme la dicha de ver mis angustias calmadas, poderosísimo niño amado de atocha venerable invocación de Jesús agradezco escuches mis suplicas y ruego des solución pronta a lo que pretendo. Amen
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Oración Al Santo Niño De Atocha – Presentación
Oración al Santo Niño de Atocha: Guía y Protector en Nuestro Camino
Santo Niño de Atocha, dulce protector de los caminantes y consuelo de los afligidos, acudimos a ti con humildad y devoción en nuestros corazones. Tú que conoces la fatiga del viaje y la angustia del alma, escucha nuestras súplicas con tu amorosa atención y bríndanos tu ayuda en nuestras necesidades.
Bendito Niño de Atocha, que con tu bastón y tu calabaza has recorrido senderos para auxiliar a los necesitados, acompáñanos en nuestro camino diario. Ilumina nuestros pasos con tu luz divina, guíandonos hacia la paz, la esperanza y la fortaleza en medio de las pruebas y dificultades que enfrentamos.
Intercesor fiel ante Dios, te pedimos que protejas nuestros hogares y familias. Resguarda nuestros seres queridos en cada jornada, librándolos de peligros físicos y espirituales. Concede tu consuelo a los enfermos, tu fortaleza a los débiles y tu paz a los atribulados.
Santo Niño de Atocha, ejemplo de humildad y amor filial, enséñanos a ser servidores amorosos de nuestros hermanos necesitados. Inspíranos a compartir nuestros dones con generosidad y a brindar consuelo y esperanza a aquellos que sufren.
Confiados en tu bondadosa intercesión, te presentamos nuestras peticiones [puedes mencionar tus peticiones específicas]. Que tu amor y protección sean nuestro refugio en todo momento, y que podamos seguir tu ejemplo de servicio y devoción hacia Dios y hacia nuestros semejantes.
Amén.
